Continuación de "Los límites de las hipótesis" publicado en la “Enciclopedia Damista” portuguesa y presentada versión aquí anteriormente con el título “Carta abierta a un autor obnubilado”, con respuesta a nuevo libro en que se tratan hipótesis históricas varias.

&&&&&&&&&&

&&&&&&

 

LA “HISTORIA” INTERMINABLE  i

1.-Introducción
2.-El poema "Scachs d'amor"
3.-Torquemada versus Timoneda
4.-Apropiaciones erróneas
5.- Hipótesis valenciana sobre la génesis de ajedrez y damas.
6.-En pos del incunable perdido
7.-Extravagancias y temas varios
8.-Conclusión

************************************************************

 

1.-Introducción

La historia de las Damas y el Ajedrez se encuentran desde siempre sumidas en el oscurantismo y los intereses creados, muchas veces producto de la ignorancia o el ocultamiento deliberado(1), otras basándose en hipótesis fantasiosas, superfluas o incontrastables(2) y así sucesivamente; incluso en mismo nombre del juego es sometido a todo tipo de conjeturas irrazonables cuando su procedencia es tan evidente (3).
Recientemente un nuevo libro sobre estos temas ha venido a "despejar" todas las dudas(4) que a este respecto pudiesen existir, dándonos de paso otras claves que sacan a la luz muchos de los secretos que la historia de estos juegos ocultan; mejor dicho esa parece ser la pretensión de los autores aunque no pasa de ser un deseo y la realidad se muestra pertinaz y no se deja explicar tan fantasiosamente.
Después de leer esta obra no queda más remedio que realizar las puntualizaciones pertinentes, siempre manejando los datos conocidos anteriormente, ya que nada más es necesario para la refutación de las fantasías.

 

2.-El poema "Scachs d'amor"


En 1905 Ignasi Casanovas encuentra un manuscrito de tres poetas valencianos Castellvi, Vinyoles y Fenollar, muy conocidos a finales del siglo XV en Valencia, en el cual se refleja una partida de ajedrez.
Este manuscrito ha recibido bastante atención llegándose a editar obras basadas en él, como "El Poema scachs d'amor" de Ricardo Calvo.
En primer lugar se debe aclarar y asumir lo que es realmente este poema, a saber la descripción de una partida de ajedrez mediante 64 estrofas (las mismas que escaques en el tablero) en las que se van refiriendo y comentando los movimientos de las piezas mediante un estilo metafórico, pleno de licencias poéticas como es natural. Es más, debido al hecho de que el ajedrez representa desde sus comienzos una batalla entre dos ejércitos, con elementos basados en la realidad (reyes, caballería, infantería, etc.) no resultará nunca difícil hacer cualquier tipo de interpretación de estrofas metafóricas y que se ajuste al mismo tipo de realidad que la representada en el tablero desde tiempos inmemoriales.
Al margen de su datación concreta y por amplio que se tome dicho periodo, no cabe duda que es el primer texto conservado del ajedrez moderno (con salvedades que se comentarán posteriormente) y que la pretensión de los autores es reflejar y comentar las reglas de este, o sea el paso del ajedrez árabe(medieval) al ajedrez que actualmente conocemos y que ya se jugaba en la Península o al menos entre determinados círculos de jugadores, al mismo tiempo que el antiguo ajedrez.
Esto es el poema, ni más ni menos, y pretender "deducir" cuestiones históricas de él no dejará nunca de ser simple especulación no contrastable. Al parecer los autores creen que este poema es la "Caja de Pandora" de la cual se puede sacar lo que a uno le parezca o interese, mediante interpretaciones subjetivas; pero claro, los hechos históricos y más los enteramente concretos y personales, necesitan de referencias explicitas e inequívocas a ellos y no elucubraciones.
Es tal el deseo de los autores de "confirmar" sus hipótesis que caen de lleno en el "efecto experimentador", es decir, encontrar y "probar" solo lo que a priori se desea soslayando cualquier prueba e incluso indicio que no confirme la hipótesis. Ya el mismo Westerveld comenta:
"Hemos hablado largamente con él(Garzón) sobre este tema, coincidiendo que había muchas cosas aún sin aclarar, incluso en nuestros días, pero siempre hemos tomado como base de que tanto el nombre de la pieza(reina) como el nuevo movimiento de la reina tiene que ver con la influencia de la reina Isabel la Católica y que debería haber metáforas en el poema de Scachs d'amor en este sentido, siendo como es, el texto originario del ajedrez moderno" (pag. 259, el subrayado es mío).


Ya sir Francis Bacon decía: "La razón humana, cuando ha adoptado una opinión, hace que todo lo demás la apoye y concuerde con ella. Y aunque haya mayor número de ejemplos, y de mayor peso, en el lado opuesto, los desatiende y desdeña o, mediante una distinción, los aparta y rechaza, para que, por esta perniciosa predeterminación, la autoridad de su primera conclusión permanezca inviolada".


Está demostrado hasta la saciedad, y esto lo digo en mi condición de psicólogo, que la evaluación de las pruebas se haya enormemente sesgada por las creencias y este es plenamente el caso que nos ocupa. Más comentarios sobre este tipo de efecto en los autores se dan a lo largo de este texto.
Sigamos viendo el poema manuscrito que nos ocupa, en primer lugar comentar que no se encuentra datado y por tanto la fecha de su realización no es exacta; el mayor experto en el poema, Ricardo Calvo, daba un periodo de 20 años, entre 1470-190, pero incidiendo que con toda probabilidad se escribió antes de 1474 que fue el año de la introducción de la imprenta en Valencia y después del cual todas las obras de los tres autores fueron llevadas a impresión y publicación, sin excepción. Parece ser una razón bastante bien fundada e incluso mantenida por uno de los autores (Garzón) tanto en su anterior obra como en correspondencia a mí dirigida en que se manifestaba en tal sentido.
Llegado este punto y con necesidad absoluta de alguna prueba que incida de algún modo en la hipótesis de la reina Isabel, los autores creen haber hallado una "prueba irrefutable" mediante la interpretación que ellos mismos hacen de una estrofa, tan metafórica como las demás, claro está. Ello les hace datar sin más razón el manuscrito en el año que les conviene, a saber 1475, obviando explicar y por tanto resolver muchas de las cuestiones que ello plantearía, entre otras:

2.1-Hechos históricos reales:

2.1.1.-El problema de la no impresión del manuscrito:

Ya ha sido comentado anteriormente el porqué de la opinión mejor sustentada (el Ms es anterior a 1474) y que los autores no saben cómo afrontar; después de tratar muy ligeramente este tema crucial lo solventan diciendo cosas como: "Lo extraño es que no se publica el poema de estos tres poetas, cuando ellos tenían costumbre de publicar todos sus poemas. Sorprende porque los reyes supieron aprovecharse de lleno de la propaganda poética en aquellos años" o esta otra joya: "Sea lo que fuere, los verdaderos motivos de no publicar el poema antes nunca los sabremos".


Sorprende esta rendición incondicional a la falta de explicación, pues según ellos mismos son eternos buscadores de los "por qué". En ese caso deberían dejar las especulaciones hasta no solucionar el camino que lleve a ellas ¿o ahora no interesa?
A nadie se le escapa que si el poema reflejase que el ajedrez cambió por Isabel y los poetas homenajeasen tal cuestión, el poema hubiese sido sin duda publicado.
Igualmente a nadie se le escapa que si los poetas autores hubiesen tenido algo que ver con el cambio de reglas también lo habrían publicado, incluso sin tener en cuenta el asunto de la reina. Es increíble creer (como dicen los autores) que los poetas o su círculo más próximo fuesen precisamente los que originaron el ajedrez moderno cambiando sus reglas, pues como queda dicho, el orgullo y simplemente el darlo a conocer lo más extensamente posible hubiese hecho que tal obra fuese impresa; es más, aun suponiendo como es lógico, que el poema fuese escrito antes de la introducción de la imprenta en Valencia (1474), en tal momento hubiese sido enviado a ella a fin de su difusión.
Pero nada de esto sucedió ni mucho menos ¿es creíble entonces que el mismo poema relatase hechos vitales, como el modelo nada menos que de la reina o la creación del ajedrez por los poetas? Evidentemente esto no tiene sentido alguno.
Lo más evidente es que el ajedrez estaba cambiando en aquella época (antes de 1474) y que los poetas eran aficionados a él, practicando el nuevo ajedrez con gran preferencia sobre el viejo. Esto hizo que posiblemente en sus años de juventud escribiesen "Scachs d'amor", al cual no dieron mayor importancia y sin duda olvidaron posteriormente; esta es la mejor explicación del porqué no fue publicado, ya que las demás que incluyan "la gran importancia de su contenido, con pleno conocimiento de ello por los autores, etc…" son de hecho imposibles (hubiese sido impreso y publicado) y están
totalmente en contra de la psicología y naturaleza humanas.

2.1.2.-La aceptación inmediata del nuevo ajedrez en todos los países:

A pesar de que los autores señalan como despectivas las expresiones que en otros países se usaban para designar al nuevo ajedrez, como "alla rabiosa" en Italia, etc, los hechos no parecen sostener tal opinión, pues este fue rápidamente aceptado allá donde se le dio a conocer, cuestión que no es posible si como parece sostener dicha hipótesis los demás países considerasen el nuevo ajedrez despectivamente.
Lo que sí es difícil de creer es que si el ajedrez se hubiese cambiado en honor de una reina española hubiese sido aceptado fuera de nuestras fronteras. Cuestión muy problemática, ya que España como potencia emergente tendía a la expansión y al dominio de otras latitudes, tanto en lo militar como en lo cultural.
Por tanto es seguro que en aquellos tiempos "no sabían que el ajedrez había cambiado por una reina española" (¿pero ni en ese mismo momento se sabía?) de lo cual habría multitud de referencias y además hubiese hecho que no lo aceptasen en países con los que además se sostenían enfrentamientos y problemas de continuo. De hecho es del todo probable que estos países ni siquiera adjudicasen a España la creación del nuevo ajedrez.
A veces las explicaciones son mucho más fáciles de lo que imaginamos: simplemente se aceptó en todo el mundo por dos cuestiones: a) No se atribuía a España, b) El nuevo ajedrez era infinitamente superior en calidad al antiguo, por lo que este se abandonó rápidamente a pesar de llevar siglos practicándose
.


2.2.-Argumentos supuestos:

2.2.1.-El modelo de Isabel la Católica: Esta suposición, a saber que la dama del ajedrez es la reina "transportada" al tablero, se tropieza continuamente y como ya se ha visto con toda clase de barreras difíciles de explicar. Veamos algunas más en este apartado:

2.2.1.1.-La datación "necesaria": A fin de forzar las fechas no queda más remedio a los autores que centrarse en 1475-1476 como del Scachs, para así coincidir al menos con la subida al trono de Isabel, pero sin tener en cuenta que en esa época no era la reina relevante que luego fue (hecho ya señalado por mí en anteriores artículos y que obvian continuamente, como tantos otros) y que los hechos clave de su reinado estaban muy lejos de suceder, como la conquista de Granada, la unificación de España, el descubrimiento de América, etc. Por tanto dar excesiva notoriedad y trascendencia a la reina en aquella época no tiene sentido.
De hecho no es muy lógico por parte de tres poetas valencianos cambiar el ajedrez y dedicar poemas alegóricos a la reina teniendo en cuenta que en esos precisos momentos las dos coronas se unifican, pero como señalan los mismos autores, con preeminencia de Castilla e Isabel, pero distinción clara entre unos reinos y otros, ya que incluso los ciudadanos de uno de ellos eran considerados extranjeros en otro. Más bien en tal situación podría haberse considerado "intrusa" a la reina, que adquiría más poder que su propio rey.
Por tanto observamos que ni aun forzando las fechas a conveniencia de la hipótesis dejan de surgir problemas a esta. ¿Y cuántos van? Pero sigamos.

2.2.1.2.-Inexistencia de referencias: Parece ser también bastante lógico (de hecho inevitable) que si el ajedrez se hubiese cambiado en honor de la reina Isabel, tal hecho apareciese continuamente en la literatura posterior, con muchas referencias directas a ello.
Pues tal cosa no ocurre ni aunque pongamos el mayor empeño en ello, por supuesto ni en referencias directas ni siquiera supuestas, por más imaginarias interpretaciones que hagamos de la literatura posterior ¿es esto posible?

2.2.1.3.-El movimiento del caballo: Dentro de los hechos que los autores indican respecto a la reina se encuentra el de que esta se identificaba para el pueblo como una "reina a caballo" debido a la gran cantidad de hechos históricos y cruciales que la unían a esta imagen. Entre ellos se hace hincapié en los miles de kilómetros que la reina hizo a caballo, parece ser que como preparación para la batalla e incluso la reunión de ejércitos de miles de hombres en los que la reina intervino personalmente acompañada de su sempiterno caballo. De hecho incluso en representaciones posteriores, como la rendición de Granada, se refleja a la reina Isabel montada a caballo.
Ello hace que Westerveld escriba:
"Mi hipótesis es que la reina Isabel, era en el ajedrez el general que debiera estar presente, también como general, a caballo, en todas las partes de su territorio" (pag. 146).


Debido a estos hechos incontrovertibles no se comprende que si la reina del ajedrez fuese Isabel no se la diese el movimiento del caballo. De hecho y con este supuesto hubiese sido mucho más lógico que la dama hubiese tomado el movimiento conjunto de torre, alfil y caballo, o dos de ellos solamente, pero siempre situando entre estos el movimiento del caballo unido al de torre o alfil.
¿Porque si la hipótesis fuese cierta no se hizo así? Es algo que se debe explicar de forma coherente y que hiere mortalmente una vez más tal supuesto.

2.2.1.4.-¿Porque no llamaban al nuevo ajedrez "de la reina" y sí "de la dama"?: Otro hecho bastante curioso y que los autores despachan como "cuestión estética" cuando es del todo lógico suponer que si la reina Isabel hubiese sido el detonante para los cambios en el ajedrez este hubiese sido llamado "ajedrez de la reina". Otra cuestión más para aclarar.


2.3.-Argumentos técnicos:

2.3.1.-La creación total del nuevo ajedrez en un mismo momento: La hipótesis mantenida por los autores exige de algún extraño modo que todas las nuevas reglas y piezas del también nuevo ajedrez sean creadas en un mismo momento (?) sin evolución ni modificación previa de ningún tipo.
Tal creencia, opuesta además a la mantenida incluso por ellos mismos hasta el momento actual, exige multitud de explicaciones a cual más improbable. Se debe explicar cómo sin evolución y por tanto depuración previa del nuevo ajedrez puede este haberse concretado en un todo tan coherente y equilibrado en todos los aspectos; esto resulta tan sumamente difícil que incluso la concreción total de las modernas reglas ha seguido pendiente durante decenios e incluso siglos posteriores. Por ejemplo las reglas sobre coronación, enroque, etc. que siguieron siendo discutidas e incluso matizadas por jugadores como Ruy Lopez o Philidor; incluso Lucena hace notar que su estilo de juego es distinto, admitiendo por fin que la coronación de peón pueda ser transformado en caballo.
Así de difícil es la depuración total de las reglas para formar un juego coherente; los autores indican que algunas de las reglas del Scachs, como la fuerza de la dama en el manuscrito, fueron modificadas y atemperadas por la práctica para llegar con las modificaciones actuales a los tiempos de Vicent y Lucena. Entonces ¿cuándo se desea se admite la evolución como necesaria y cuando no se acude a la creación instantánea?
Y además se debe tener en cuenta la cantidad y calidad de los cambios acaecidos en el nuevo ajedrez, entre los que se encuentra no solo la creación de la dama y el alfil así como la supresión de sus homónimos medievales, sino también los nuevos movimientos del rey y los peones, el primer intento de enroque, etc.
Hasta Garzón se extraña de estas circunstancias señalando:
"Ya mostramos nuestra extrañeza de que no se enfatice nunca el movimiento del alfil que también era nuevo. Aún llama más la atención el dominio que los poetas tienen de esta pieza: lo desarrollan por sus casillas naturales y lo intercambian por el caballo, equiparación material que no es fácil de calibrar al tener movimientos muy disímiles. Tal vez es tan fuerte la novedad de la reina que eclipsa todo lo demás" (pag. 288).

O sea, que se admite que los poetas conocen ya el equilibrio entre alfil y caballo, así como el desarrollo lógico de estos y como explicación se da ¡que la dama es tan importante que los poetas se han olvidado de todo lo demás incluido lo nuevo! Está muy claro que como decía Francis Bacon cualquier cosa se tergiversa e interpreta de acuerdo a la opinión que deseamos mantener.
Parece increíble sostener ideas tan extremas cuando existen otras mucho más naturales y que no requieren "actos de creación ex novo" para su coherencia. Es mucho más probable que el ajedrez se estuviese matizando durante años anteriores (bastantes años muy posiblemente) y depurando las modificaciones mediante las pruebas en partida viva a fin de admitir cada modificación, debido a ello ya estaban consolidadas las pruebas respecto al alfil y conocido su modo correcto de desarrollo y su equivalencia con el caballo, ese es el motivo de no prestarlo atención en Scachs; la creación de la dama sería la última de las grandes modificaciones del juego (salvando el enroque moderno y otros temas menores) y por ello estaría en plena coherencia con el resto de las modificaciones y nuevas piezas, ya que se podrían considerar así incluso los peones y el mismo rey que cambiarían su movimiento y valor de forma drástica.
Es por ello que la dama ya habría sido introducida tiempo antes del Scachs y en este sería la primera vez que esta pieza viese la luz en forma escrita; de hecho el mismo Garzón sostenía previamente que otros documentos anteriores eran posibles pruebas de la existencia de la dama, como el "Espill" de Jaume Roig de 1459("escacs pel roc/ tens per la dona; sus-mat te dona")(5)(pag. 149-150). Pero claro, seguir manteniendo este dato destruye todo el entramado actual y por tanto se obvia su importancia. Sobre estos temas, el autor y su anterior obra volveremos más adelante.
Las inferencias de los autores son tan erróneas que ni aun dando por válidas las fechas que proponen y la identificación de elementos (premisas) se puede llegar a ninguna conclusión. Si tenemos:

(A) = existe la reina Isabel (hecho cierto)
(B) = existe la dama de ajedrez (hecho cierto)
(C) = el poema contiene referencias directas entre (A)(B) (premisa supuesta que aceptamos para comprobar el silogismo)

Entonces vemos que:

A-->C (A implica C, pues sin la reina no se habría dado C)
B-->C (B implica C, pues sin la dama no se habría dado C)

Pero nada nos hace dar por validas:

A-->B (la dama existe por Isabel)
B-->A (Isabel existe por la dama),

Estos hechos (A, B) pueden ser perfectamente independientes y en las relaciones anteriores no existir transitividad. Igual lo podemos observar en razonamientos como:
Si A es un águila entonces es un ave
Si B es una paloma entonces es un ave
Sin implicar que "Si A entonces B", puesto que un águila no es igual a una paloma.

En pocas palabras, se pueden utilizar sucesos metafóricamente (como licencia poética) sin que estos tenga relación "causa-efecto", aunque eso sí, algo se puede deducir de todo lo comentado, y es que las personas que realizan este tipo de inferencias no son de ciencias. Por tanto vemos que ni con la mejor voluntad y admitiendo como válidas todas las premisas, se puede llegar a este tipo de conclusiones.

Creo que no es necesario añadir más a lo considerado sobre este tema al estar muy claro que no solo el poema no indica "pruebas incontrovertibles" de la creación de la dama por la reina Isabel sino que además este supuesto crea más problemas de los que resolvería, como se muestra en todo lo anterior.
Tal idea debe ser probada por referencias documentales directas y personales, las cuales no existen, y no por interpretaciones de poesías metafóricas y únicas, las cuales no pueden ser tomadas como base histórica real.
Lo curioso del caso es que, como ya señalé en escritos anteriores (2), tal hipótesis además de indemostrable es realmente superflua a fin de demostrar la procedencia hispana de ajedrez y damas, la cual está sobradamente documentada. El añadir hipótesis fácilmente atacables solo da pie a los detractores de la génesis española para encontrar argumentos contrarios y basándose en ellos desdeñar todas las verdaderas referencias hispanas.
Como ya indicara Ricardo Calvo, y no olvidemos que él mismo era el mayor estudioso del "Scachs d'amor", este tema siempre quedará como especulación; así sigue en el momento actual a pesar de los ímprobos esfuerzos de los autores, los cuales deberán seguir investigando si desean probar esta hipótesis en algún momento, pero yo no se lo aconsejaría pues solo será una pérdida de tiempo, ni más ni menos.

Otra cuestión es si el poema contiene ajedrez moderno o no; aquí también hay que diferenciar, pues la partida reflejada sigue las reglas actuales, pero el reglamento indicado no es el actual, sino una fase previa que necesitó largos años de depuración para llegar a las reglas aceptadas, incluso siendo estas últimas depuraciones de mucha menor entidad y dificultad que las ya realizadas.

Con ello vemos claros dos temas:

1) Que difícilmente (por no decir imposible) algo coherente y bien ensamblado salga de la nada sin previa evolución, contra lo que mantienen los autores.

2) Igual que la partida no infringe las normas actuales, pudo haberlo hecho en el caso de utilizar alguna de las reglas arcaicas que eran posibles de usar por los poetas, ya que entonces eran legales.
Esto se puede dar incluso entre juegos diferentes; podemos construir un enorme número de partidas que son igualmente legales en damas españolas y anglosajonas, para ello basta con utilizar solo peones o en caso de damas mover un escaque como máximo en españolas; hecho esto, nadie podría decir que tales partidas son de un juego concreto, sino de varios posibles. Otro ejemplo son los problemas medievales de ajedrez, entre los que cualquiera de ellos que no utilice piezas o reglas modernas podría pasar por ajedrez actual sin serlo.

Teniendo en cuenta lo anterior se puede aceptar que el poema transcribe una partida de ajedrez actual pero no el reglamento actual, sino una fase evolutiva de este, que podemos tomar como representativo del ajedrez moderno por ser la vía hacia él.

3.-Torquemada versus Timoneda


Es notable el empeño de los autores por hacer desaparecer el libro de Torquemada (6) de la bibliografía damistica situando en su lugar el libro de Timoneda (7), aunque más que notable se debería decir "desesperado".
En primer lugar indicar que se dedican varios capítulos a este tema, de hecho bastante reiterativos y que bien podían haber sido compendiados en uno solo escrito por ambos autores que evitase tanta reiteración e incluso contradicción.
Es probable que como sostienen, el libro de Timoneda sea anterior a la fecha de su impresión pero esto no implica la eliminación del Torquemada, pues ambos hechos pueden ser ciertos sin ser contradictorios. A fin de encontrar cualquier cosa que "elimine" a Torquemada se hacen suposiciones peregrinas que por supuesto no se aplican a otros autores o cuando no se desea. Algunas son:


a) Se supone que Juan Timoneda es el librero Juan de Timoneda, que comenzó su actividad en Valencia, a mediados del siglo XVI. Esta suposición está por comprobar definitivamente.
b) Ningún autor de libros de damas de los siglos XVI, XVII y XVIII nombra a Torquemada: En efecto, pero tampoco ninguno nombra a Juan Timoneda ni a Mirón del Castillo (en el libro de 1635 supuesto anterior) ni muchos de ellos nombran a otros que se saben anteriores, sin que ello implique la no existencia de estos. Tampoco ningún autor de ajedrez nombra al Vicent de 1495 y ello no ha implicado su inexistencia, referida posteriormente por personas ajenas al ajedrez.
c) Nicolás Antonio, autor de "Biblioteca Hispana", en la cual se referencia por primera vez el libro de Torquemada y aporta todos los datos bibliográficos e incluso el tamaño de la obra ha cometido "diversos errores" a juicio de los autores. El primero de ellos es grave, ya que según estos ha añadido la palabra "Damas" al final, sin existir en la obra; mal asunto, pues pone en entredicho a un autor considerado modélico para seguidamente desdecir su propio supuesto y admitir que la palabra ya existía en la época de Torquemada.
Hay que tener mucho cuidado con estas hipótesis gratuitas que afectan incluso a la fama de otros, en este caso Nicolas Antonio; pero a pesar de todo se sigue insistiendo en este dato después de haber sido refutado.
En un afán desmedido por encontrar "errores" en la referencia de Nicolás Antonio, se dice lo siguiente: "Y, lo que es más importante, la grafía del nombre de ambos autores comienza con la letra T, lo cual puede propiciar un error del bibliófilo que facilitó la fecha a Nicolás Antonio. A partir de ahí, el equívoco se ha perpetuado"(?).
Pero ¿en que se parecen los nombre de "Antonio de Torquemada" y "Juan Timoneda"? ¿Es posible un error entre ambos? Una vez más se intenta confirmar las propias ideas a cualquier precio.
d) Pero no solo se duda de Nicolas Antonio, sino también del "Manual del librero Hispano-americano " de Palau y Dulcet, los cuales indican incluso el número con el que se hallaba un ejemplar en la Biblioteca Municipal de Valencia, a saber el 334904.
Los mismos autores señalan que en sus indagaciones y consultas a las autoridades bibliotecarias valencianas se indica por estas que actualmente no existe tal volumen, pero que también han desaparecido en el tiempo señalado más de 300 obras distintas; debido a esta misma afirmación no se puede suponer que el Torquemada no haya existido en las bibliotecas, sino que puede perfectamente haber sido así y desaparecido posteriormente, ya sea por incendio como señala Carceles Sabater o por cualquier otra causa.

Como es bastante claro no existen pruebas suficientes para deslegitimar el libro de Torquemada y mucho menos para indicar que el Timoneda debe ocupar su lugar. Sobre esto se puede señalar:


a) Aun admitiendo como "Timoneda" a Juan de Timoneda, se sabe que este era más bien un plagiador experto y con bastante certeza ni siquiera era jugador de damas, por lo que su obra sin duda es el acopio de problemas de otros autores; si como señalan parte de la obra de Torquemada se contiene en Timoneda, entre otros posibles plagios, es indudable que existían autores anteriores a Timoneda de los que este copió.
Por tanto se puede suponer perfectamente que uno de estos autores es Torquemada y por ello la suposición de "Torquemada es Timoneda" debe cambiarse por "Timoneda es Torquemada" que es distinto.
b) Por más vueltas que se le quiera dar al asunto, la verdad es que el final señalado por Montero en su libro e indicado como incorrecto en "el libro editado antiguamente en Valencia" no se encuentra en Timoneda.
Suponer que este final podría encontrarse entre los muy escasos problemas quizá perdidos de Timoneda es solo eso, un suponer; por tanto y con las pruebas reales en la mano, debemos concluir que el Timoneda aun suponiéndole de mayor antigüedad a su fecha de impresión, no es el libro al que se refiere Montero, que seguramente desconoce incluso el nombre del autor y por ello no lo indica.
c) Respecto a la posible conexión del Timoneda con el ajedrez moderno, en nada afecta a la existencia del Torquemada; además no representa ningún descubrimiento, pues el juego de damas procede en parte del ajedrez (1)(3) y por ser este anterior y haberse editado obras con contenido gráfico (el mismo Lucena entre otros) no es de extrañar que otro juego desarrollado en el mismo tablero aproveche los gráficos e incluso parte del léxico ya existentes para reflejar sus problemas, ¿qué hay de extraño en esto?

Vemos que no existen pruebas que permitan eliminar Torquemada para situar en su lugar a Timoneda ni aun suponiendo a este anterior a la fecha de 1635 en que fue impreso; ambos hechos pueden ser reales e independientes.
A tenor de las pruebas puede ser posible que la impresión y edición de Timoneda fuese en realidad la primera que se hacía de este, basándose en un manuscrito antiguo del mismo Timoneda en que recopilasen problemas de otros pero no llegase a publicar; hay que hacer notar que nada en la edición de este libro indica que haya sido impreso antes y ni siquiera que Timoneda sea un autor ya desaparecido. Lo mismo se puede decir del añadido de Mirón del Castillo.
Sobre el tema de tan afanoso proceder para sustituir a un autor por otro vuelvo posteriormente.

 


4.-Apropiaciones erróneas


En su afán de apoyar sus hipótesis los autores cometen errores de bulto, algunos de ellos ya comentados y otros tan graves o más por comentar, entre ellos el dar como propio de Valencia obras que solo tienen en relación con ella el lugar de impresión y no son propias de los círculos valencianos.
En la página 250 de su obra (4) se indica la producción valenciana de ajedrez y damas en la que existen incomprensibles errores, por decirlo de alguna manera. Veamos:


1) Dentro de la producción valenciana de ajedrez se encuentra el celebré libro de Lucena impreso y editado en Salamanca en 1497, con la justificación de que "se basa en lo esencial en Vicent".
No creo que nadie en el mundo pueda estar de acuerdo con esta barbaridad (salvo los autores, claro) y casi sobran los comentarios, pero alguno haremos:

a) La relación con Vicent está por comprobar, una vez hallado este libro perdido, y por tanto solo se trata de una suposición. Sobre la validez de las especulaciones respecto a Vicent hechas en (5) las trataré posteriormente.
b) Aún en el caso de que Lucena contenga problemas de Vicent no se puede decir que el Lucena sea valenciano, pues también contiene otros problemas no relacionados con este. Además ¿sería Vicent el autor de los problemas que figuran en su libro? Pues no con toda seguridad, ya que muchos de ellos eran del ajedrez medieval y siguiendo la "lógica" de los autores entonces toda esta producción seria árabe y no valenciana.
c) Siguiendo esta "lógica" también las obras posteriores de Lucena, los manuscritos del Escorial y de la Biblioteca Casanatense de Roma serian obras valencianas, así como el Damiano. Yo ya me pregunto ¿habrá algo que no sea valenciano?

2) Entre las obras de Damas se cuentan como valencianas:

a) "El ingenio o juego de marro, de punta, o damas" de Antonio de Torquemada. En primer lugar se observa que aún en estos momentos de su exposición los autores no se atreven a eliminar este libro de la bibliografía damistica ¿porque si según ellos "han demostrado" que no ha existido?
Ahora está claro el porqué de todos los esfuerzos para que Timoneda sustituya como primer libro a Torquemada, principalmente porque este es astorgano y Timoneda valenciano (suponiendo que este sea realmente el Juan Timoneda autor del libro de 1635), cuadrando mejor en sus hipótesis.
b) "Libro de damas, vulgarmente nombrado el marro" (1591) de Pedro Ruiz Montero "El Andaluz" originario de Córdoba, con lo que está todo dicho.
c) No se hace mención del Alonso Guerra, posiblemente de 1595, aunque realmente no se sabe si es del todo correcta su datación; en todo caso no se menciona ya que entre otras cosas el autor es de Osuna(Sevilla) y ni siquiera estaría impreso en Valencia.
d) Incluso existen dos posibles libros anteriores a estos y no valencianos, lo que está pendiente de comprobar; uno de ellos es el anónimo de Juan de Junta(inventario de 1556), titulado "Juego de Damas", encontrado en Burgos.
El otro pertenecería a un autor llamado Valle, con toda seguridad no valenciano contra lo que opinan los autores. De hecho hacen mención a las palabras de Rodrigo Caro(1624) que dice
: "De ese juego escribió un valenciano un libro que yo vide impreso y leí algunos años ha, y otro llamado Valle".


A partir de este comentario los autores hacen el siguiente razonamiento: "Valle era un nombre que hace años figuraba 800 veces en la guía telefónica de Barcelona, 400 veces en la guía de Valencia y 150 veces en la guía de Sevilla, por lo cual estimo que el damista Valle también debe ser de Valencia".


¿Cabe un despropósito mayor? ¡la guía telefónica para deducir hechos de hace siglos! Cualquier cosa se tergiversa para convertirla en valenciana; de hecho y según Rodrigo Caro, el autor Valle no era valenciano pues en tal caso habría comentado el hecho de dos valencianos, no de uno y otro autor llamado Valle.

A la vista de estos pequeños detalles queda evidenciada la fiebre que ataca a los autores para lograr de cualquier manera que todo sea valenciano; una cosa es que una de las imprentas más importantes (o la más) en los siglos XVI y XVII fuese Valencia y otra que los libros allí impresos pertenezcan a la cultura valenciana como tal. De hecho cuando otras imprentas igualaron o superaron a la valenciana, casi todos los demás libros fueron impresos y publicados en otros lugares.
Actualmente la práctica totalidad de libros son editados entre Madrid y Barcelona y eso no quiere decir que pertenezcan a ninguna "cultura madrileña o barcelonesa", solo quiere decir que el mayor número de editoriales se encuentran en esos lugares, ni más ni menos. Uno de mis libros ha sido publicado por una editorial barcelonesa y otro impreso y editado en Madrid y yo no soy de ninguna de estas ciudades.
De hecho ni siquiera los libros señalados están escritos en valenciano, como sí ocurre con "Scachs d'amor", sino en castellano antiguo. Incluso el libro de Valls sitúa en primer lugar la acepción "damas" usada primeramente en Castilla a la acepción "marro de punta", indicada como más vulgar.

Por tanto hay que tener mucho cuidado en asimilar valores u obras no propias aunque solo sea por lo fácil que resulta desenmascarar la estratagema; en estos momentos en que cada uno escribe la historia como le viene en gana pueden parecer temas de poca importancia, pero son de máxima y los organismos oficiales, como la Generalidad Valenciana, editora del libro (4), debería tener más cuidado con estos datos que en realidad la dejan en evidencia al ser tan claramente incorrectos.

5.- Hipótesis valenciana sobre la génesis de ajedrez y damas.


En mi opinión hay que separar claramente la génesis de ambos juegos; respecto al ajedrez me parece posible la génesis valenciana de este, al menos tanto como la génesis española al respecto del resto.
En ajedrez no ocurre lo que en Damas, respecto a las cuales la prioridad española es tan evidente y con tantos años e incluso siglos de antelación (1) que toda oposición no es más que producto de la cerrazón exterior y de la lucha de culturas, que poco a poco cederá.
No ocurre así en ajedrez, ya que este juego fue introducido siglos antes en Europa por los árabes y se practicaba en muchos lugares. La cuestión es si el nuevo ajedrez fue creado en España o en otro país anteriormente, para los que se barajan casi en exclusiva Francia e Italia como oponentes, con pocos años de diferencia.
Los hechos concretos avalan la tesis española, ya que los primeros documentos escritos se dieron en España [Ver (1), también valido en muchos comentarios respecto al ajedrez], y solo posteriormente y gracias a la expansión española de la época pudieron otros países como Italia (con quien se mantenían relaciones continuas e incluso existían posesiones españolas) hacerse eco en poco tiempo del nuevo ajedrez.
Estos mismos hechos que avalan la prioridad española sobre el nuevo ajedrez avalarían de igual modo la prioridad valenciana en la Península, ya que solo el "Scachs d'amor" e incluso "Espill" son suficientes para atestiguarlo, sin esperar a la aparición del Vicent.
Por tanto no se necesitan hipótesis extrañas y superfluas a la cuestión y la génesis valenciana está bien respaldada.
El caso del juego de damas es más complejo y actualmente no se puede asegurar en qué lugar de la Península nació; es incuestionable que el ajedrez ha generado en parte el juego de damas pero ello no quiere decir que los mismos círculos de jugadores que crearon uno lo hicieran con el otro. De hecho la otra base del juego de damas, el alquerque o andarraya se conocía en todos los reinos y la expansión del nuevo ajedrez en esos años pudo dar lugar en cualquiera de ellos a las modificaciones pertinentes.
Se acostumbra a citar el comentario de Ruiz Montero como prueba del origen valenciano; este escribía: "En Valencia, más que en ningún otro lugar, me ha parecido imprimir lo que he alcanzado, porque en ella y en su reino más que en las otras provincias y reinos, que he andado, he visto y tratado diestros jugadores".
Como es evidente lo único que indica Ruiz Montero es que ha visto allí los mejores jugadores, pero para el tema que nos ocupa, lo importante es lo que realmente indica: que en muchas provincias y reinos también se jugaba a las damas. Luego nada se infiere en estas frases sobre el tema del origen del juego; de hecho también dice que el origen del juego se debe a Muscio Scevola, siglos anterior(sobre estas tesis fantasiosas ver 4).
Todo esto indica además que un autor relativamente próximo al nacimiento del juego no sabía ya donde se había originado realmente. De hecho y si hacemos caso a la bibliografía del juego, la candidatura de Andalucía seria fuerte, ya que muchos de los primeros autores del juego eran de allí originarios.
Incluso los autores (4) solo pueden suponer el origen valenciano sin pruebas reales que lo avalen, solamente su comentario de la creación en Valencia de la dama del ajedrez, débil prueba para asentar sobre ella el nacimiento de otro juego.
En mi opinión y como ya hice notar en comunicación privada a uno de los autores (Garzón) el que en un lugar se practique o sea más popular un juego en un momento dado del tiempo no asegura que tal juego se originó allí, aunque tal posibilidad es mayor cuanto más cerca nos situamos del nacimiento de dicho juego.
Por tanto la génesis del juego de Damas está todavía pendiente de aclarar (dentro de España, claro está) y en mi opinión los candidatos más importantes a ello son Valencia, Andalucía y Castilla, pero sin datos concretos para dilucidarlo definitivamente.

 


6.-En pos del incunable perdido


Esta obra de José Antonio Garzón, anterior a la actual, ha quedado definitivamente dañada y yo diría que destruida con el nuevo libro (4). No sé si el autor se ha percatado totalmente de ello pero ha hecho que "En pos…" ya no sea fiable en ninguna de sus conclusiones.
Es lástima que el trabajo de toda una vida se tire así por la borda debido a la asunción, solo en los últimos meses en su obra de investigador, de hipótesis extrañas y en las que nunca creyó como deja claro en anteriores comunicaciones a Westerveld (pag. 224) y a mí mismo.
La destrucción de "En pos del incunable perdido" se lleva a cabo en su totalidad ya que el mismo autor reconoce como erróneas en su actual obra todas sus elucubraciones anteriores sobre el "Scachs d'amor" y sobre la reforma del ajedrez, incluso dice textualmente que deja atrás sus anteriores argumentos técnicos, etc.
Produce perplejidad ver ahora las ideas básicas sobre las que Garzón asentaba toda su obra, de tantos años, como
"…cabe suponer que se necesitan varios años de práctica continuada para alcanzar la madurez y destreza de juego reflejada en el poema(Scachs)"(5)(pag. 163-164) o "Prueba de que la reforma no es ni mucho menos la consecuencia de una noche de febril inspiración, sino que todo el bagaje anterior, siglos de práctica, composición de problemas y tratados…"(5)(pag.164).


Y así continuamente, toda su obra anterior se basa en este tipo de premisas. Incluso se permite hacer disquisiciones metafísicas respecto al ajedrez: "Se había conseguido un mundo endiabladamente perfecto. Un equilibrio demasiado escalofriante y que se escapa a mi compresión y me hace preguntarme: ¿qué es realmente el ajedrez?"(5)(pag.170)

Al menos el autor ya tiene respuesta a sus anteriores preguntas ¿qué es el ajedrez? Pues nada, un jueguito que para construirle se sientan una tarde los tres poetas y entre una palabra y otra pues sin más esfuerzo dan con "ese resultado tan maravilloso y perfecto que se escapa a la compresión". Así de fácil lo debe ver ahora el Sr. Garzón.
En mi opinión ni siquiera se ha percatado realmente de lo grave que incluso para su currículo de investigador es este tema, ya que:

1) O toda una vida dedicada al tema no le sirvió en tantos años nada más que para llegar a ideas completamente erróneas (realmente no acertar ni una), lo que pone en tela de juicio la competencia de cualquier persona.
2) O ahora está totalmente equivocado, destrozando toda su obra anterior, que sería mucho más valida, lo que aún es peor que lo anterior.

Total, que dos capítulos completos de su obra anterior quedan reducidos por él mismo a cenizas y sus elucubraciones "demostradas erróneas"; en este caso ya solo queda del libro, como capítulo de investigación importante, las consideraciones sobre Lucena y Vicent como libros diferenciados o no.
Según el autor y basándose en teorías de Yuri Averbach, Ricardo Calvo y sobre todo él mismo mediante el estudio de algunos problemas del Lucena, llega a la conclusión de que estos pertenecían casi por entero al Vicent, que recordémoslo, es un libro desaparecido del que no sabemos realmente su contenido. Incluso Westerveld duda del contenido del Vicent escribiendo:
 "Por lo tanto no sabemos nada si en este libro se trató la nueva dama poderosa"(pag. 145)(4). Los autores deberían sincronizarse mejor para no contradecirse continuamente, cuestión que arreglan rápidamente cuando es necesario y se dan cuenta del error.
Volviendo al tema que nos ocupa, lo único que nos queda de (5) es ver si se pueden salvar las conjeturas de Garzón sobre el Vicent-Lucena, ¿pero cómo dar por validas unas deducciones sobre un libro no existente a un autor que se ha equivocado en todo sobre documentos que tenía a la vista? ¿porque no va a equivocarse en cuestiones ocultas cuando lo ha hecho (según su actual opinión) sobre temas muy evidentes?
Con ello termina de destruir por completo la obra anterior y todo lo escrito durante tantos años al respecto y hace que ahora y más que nunca haya que encontrar el incunable de Vicent para cerciorarse de su verdadero contenido. Ya no podemos dar por validas deducciones de nadie sino solo hechos contrastables; por tanto y mientras no se demuestre lo contrario el Arte de Lucena sigue siendo el primer libro impreso sobre el nuevo ajedrez.
En mi opinión sí debe contener ajedrez moderno y así se lo comenté a Garzón indicando el por qué aparece el juego de damas en las referencias del Vicent:

"Las menciones al respecto del libro y en las que se mezcla el juego de damas no puede ser más que por:

a) En el mismo se hace mención del nuevo juego como "de la dama", lo que hace ir en un solo paso al plural "de las damas", que unido a la existencia de este juego completa la confusión.
b) Lo anterior se une a que las personas que hacen estas referencias no son muy duchos en ninguno de los dos juegos, confundiéndoles en la acepción "juegos" sin diferenciarlos claramente. "


A este respecto Garzón me contestó:

"Sin embargo, usted plantea una cuestión que hasta ahora había pasado inadvertida a todos. ¿Y si lo que confunde a Vargas -y en menor medida a Ribas y Caballero- es el encabezamiento "de la dama", con el que con toda seguridad empezaban muchos problemas? Una idea importante y muy a tener en cuenta en el futuro"

En efecto, es una idea importante y la creo mucho más fiable respecto al contenido en ajedrez moderno que las elucubraciones de "En pos del incunable perdido", producto de una época en la que el mismo Garzón reconoce, no sé si muy conscientemente de su trascendencia o no, que su acierto en las deducciones no era nada notable.
Un error grave de Garzón en referencia al método demostrativo es su comentario siguiente
"¿por qué siempre se exige una demostración de que el libro de Vicent contenía ajedrez moderno? También se puede exigir la demostración contraria "(5)(pag. 113).


Esto es incorrecto pues quien propone una hipótesis debe cargar con la prueba de ella y no al contrario; incluso en este caso con mayor motivo ya que anteriormente nunca se había producido el hecho a demostrar y por tanto se asume en principio inductivamente que los hechos anteriores seguirán produciéndose, debiendo demostrarse la aparición del nuevo por primera vez.
Pero ahora ni mi opinión ni la suya, favorables a la aparición del ajedrez moderno en Vicent, valen a este respecto y se hace necesario encontrar el libro para cerciorarse de su contenido, ni más ni menos.


7.-Extravagancias y temas varios


En esta sección comentaré algunos detalles que llaman la atención en el libro comentado. Veamos:

a) Para mi sorpresa aparece un prólogo de Ricardo Calvo cuando este no ha visto el libro debido a su prematura desaparición. Tal prologo debe pertenecer al libro de 1997 (Westerveld) pero no parece muy correcto incluirlo aquí cuando el autor no conoce en absoluto las conclusiones del libro, en muchos casos dispares con las suyas propias.
Incidir en que Calvo estaría de acuerdo con este libro es solo "suponer" en lo que son expertos los autores y además no elimina la gravedad del hecho.

b) En el libro se dedican dos capítulos a los libros de damas. En uno de ellos escrito por el bibliófilo Victor Cantalapiedra se hace un repaso a los libros españoles hasta 1992 y en el otro debido a Weterveld se hace un repaso a dichos libros hasta el año 1996.
Yo me pregunto ¿no se ha editado su libro en 2004? ¿Entonces por qué pararse en 1996? El primer artículo hace tiempo fue escrito pero no es así con el debido a Westerveld, que conoce sobradamente la edición de mi libro "Tratado Hipermoderno del Juego de Damas" (2001) y que sí nombra a pié de la página 225.
Sobre este libro el mismo Westerveld opina en su página web que "es incluso barato para su contenido" y el otro autor (Garzón) opina en comunicación privada a mí dirigida que :"deseo felicitarle sinceramente por su libro (en el campo del ajedrez tenemos pocos trabajos modernos de ese calibre)".
El por qué dentro de la bibliografía de un libro de 2004 no aparece otro sobradamente conocido por los autores, además el primero del siglo XXI, es algo que deben explicar, aunque ello no es posible desde ningún punto de vista coherente excepto el de tratar deliberadamente de ocultarlo debido a su magnitud e importancia, lo que dice poco de su buen hacer.
Aparte figuran los primeros libros de damas editados en distintos países, excepto precisamente en Portugal que es donde más y mejor se han cuidado las damas españolas, con literatura sobre el tema superior a cualquier país; esto es incomprensible e inadmisible y debe ser corregido de inmediato.

c) En lo que respecta a la introducción de la segunda parte de la obra no tiene desperdicio, todo un panegírico de Westerveld hacia su propia persona. En cierto modo podría caer simpático y cierta parte de su trabajo es positiva (búsqueda de libros, defensa de España como país origen), pero su personalidad tiene características bastante férreas y persistentes, entre ellas: a) "Todo es mío" y b) "Siempre tengo razón".
Respecto al punto (a) ya tuve que demostrarle (2) que distintas hipótesis sobre el juego no son ni mucho menos suyas; recientemente también le he tenido que demostrar en comunicaciones privadas que no tiene derechos de propiedad sobre las damas españolas, cuestión que me quería hacer ver respecto a portadas de libros señalándose él como propietario o único poseedor de estas, hasta que le demostré lo contrario, cosa que sabia y me ocultaba deliberadamente.
Respecto a (b) es posible que sea caso único en todo el orbe; no tiene reparos en compararse nada menos que con Galileo (web) o escribir en su nuevo libro barbaridades como la siguiente, que no se sabe si producen estupor o hilaridad:

"He inventado mentalmente el movimiento perpetuo con un artilugio que se pone en agua y donde se usan dos fuerzas: la ley de presión ascensional y la ley de la gravedad. Cuando una fuerza termina comienza la otra. Funciona con agua, aire, pesos y cápsulas. Propuse mis ideas a la British Petroleum y les pedí autorización para hablar con sus mejores ingenieros. British me contestó secamente que ellos tienen sus propios investigadores. …" (4)(pag. 226)

Para terminar diciendo:

"Abandoné el proyecto debido a mis múltiples viajes al extranjero y por no ser ingeniero, pero para una mayor seguridad hice un acta notarial en la que en holandés está escrito el invento, porque sigo creyendo en la posibilidad". (4)(pag. 226)

Y yo me pregunto ¿tiene este hombre la menor idea de lo que está diciendo? Pues no, claro está. Solo lo anterior si fuese leído en primer lugar por cualquier persona con un mínimo de conocimientos y sentido común haría que abandonase su libro sin más, pues ese autor no podría decir nada coherente.
No solo revela su desconocimiento total de los mínimos rudimentos de la ciencia (palabra que por cierto no hace más que utilizar) y su falta de respeto hacia los conocimientos de los demás (es irrelevante que consulte a cualquiera por experto que sea en la materia, si no coincide con él simplemente no le hace caso) sino que además es incoherente con sus propias ideas.
¿Pero usted sabe lo que implica lo que está diciendo? Sr. Westerveld, si tal cuestión fuese posible y tal motor perpetuo se pudiese realizar (lo cual es sencillamente imposible en nuestro universo, como sabe cualquier persona con un mínimo de conocimientos) resultaría que: a) Los problemas energéticos de la humanidad estarían resueltos para siempre, pues se tendría energía infinita a cambio de nada; por tanto podría ser eliminada fácilmente el hambre en el mundo o cualquier cosa que se desease, b) La biodiversidad, el calentamiento global y cualquier otro problema estarían solucionados, ya que no sería necesario esquilmar la naturaleza en busca de energía c) No hay duda que con un sistema así se podría colonizar gratuitamente el universo entero, de hecho se podría generar más energía de la que este realmente contiene(??), d) El autor de tal prodigio sería considerado el mayor genio que jamás hubiese existido y sin duda el mayor benefactor de la humanidad, sin comparación posible, y un largo etc.
En tal caso es incomprensible y de verdadera risa que alguien "con tal posibilidad" abandone el proyecto "por qué tenga otras cosas o viajes que hacer" o para temas tan "importantes" como el juego de damas (???).
Es verdaderamente insensato por parte de organismos oficiales, en este caso la Generalidad Valenciana como editora del libro, que se avalen obras que contienen estos disparates, dejando en muy mal lugar al organismo de que se trate. Sería prudente al menos hacer una nueva revisión de esta obra y eliminar algunas partes, entre ellas esta que señalo, pues en caso contrario el descrédito es mayúsculo.


8.-Conclusión


Era mi intención hacer un comentario más extenso del libro en cuestión, pues muchos temas y puntualizaciones dejo sin tratar, pero creo que ya le he dado más notoriedad de la que el mismo merece.
La cantidad de inferencias erróneas, suposiciones tacitas, apropiaciones indebidas, interpretaciones falaces, etc. es tal que realmente habría que escribir otro libro entero para tratarlas una por una, tiempo que para un tema tan poco relevante no voy a perder, claro está, ya que lo comentado se revela más que suficiente.

 

Copyright José Luis González Sanz
2004
***********************************************


(1) Ver "Las Damas y su origen: el fin de las fantasías" en esta misma página (sección "Artículos"), también publicado en Enciclopedia Damista.
(2) Ver "Carta abierta a un autor obnubilado" en "Artículos" o "Los límites de las hipótesis" en Enciclopedia Damista.
(3) Ver "Origen de la palabra Damas" en sección "Artículos" y en Enciclopedia Damista.
(4) "La reina Isabel la Católica: su reflejo en la dama poderosa de Valencia, cuna del ajedrez moderno y origen del juego de Damas" Govert Westerveld y José Antonio Garzón Roger (coautor)
(5) "En pos del incunable perdido" José Antonio Garzón Roger (2001)
(6) "El ingenio o juego de Marro, de punta, o Damas"-Antonio de Torquemada-Valencia-1547
(7) "Libro llamado Ingenio, el cual trata del Juego de Marro de punta"-Juan Timoneda-Tolosa-1635

 

 

José  Luis González Sanz

Todos los derechos reservados

 

&&&&&&&&&&&&&

&&&&&&&

&&&

&